Graciela Paz es Ingeniera Vial, egresada de nuestra Facultad, se desempeña actualmente como docente en las carreras de Ingeniería Civil, Vial y Técnico Universitario Vial. Durante su trayectoria en nuestra Unidad Académica, también ha sido Directora del Departamento de Obras Viales y Consejera  Directiva. Además, ha trabajado en Vialidad Nacional, como inspectora de obras, jefa de división de proyectos, entre otros cargos.

La dedicación a su profesión ha marcado su vida, piensa que la ingeniería, “es una parte muy importante de mi vida. Desde siempre consideré que la técnica es el progreso, es la carrera que abre los caminos hacia un verdadero desarrollo. Absolutamente cierto que el crecimiento de los pueblos tiene relación entre número de ingenieros, en proporción a los habitantes y a la superficie”. Y agregó: “Elegí esta carrera porque quería ser parte de la gente que hace obras, que materializa proyectos, sueños, deseos, necesidades. El sonido de las máquinas y personas trabajando, es verdadera música para mí”.

Recuerda que durante el estudio de su carrera, “jamás me sentí diferente ni excluida, muy por el contrario, totalmente integrada y compartiendo plenamente todo: viajes, clases, exigencias en los exámenes, todo en el mismo nivel de requerimiento”. El acompañamiento de la Facultad y sus docentes hacia los estudiantes, es una característica con la que se cuenta actualmente y también en ese entonces, la Ing. Paz lo destaca: “Fue fácil entrar a trabajar, los mismos profesores se ocupaban de ubicarnos para que ganáramos experiencia y nos vinculaban con las personas que sabían nos iban a transmitir conocimiento y experiencia. Siempre me dediqué específicamente a la parte vial. Me ayudaron (los docentes) también a tener la beca en la UBA para hacer la especialización en Caminos y trabajar en la Dirección Nacional de Vialidad”.

Sin embargo, su pasión por la ingeniería debió ser replanteada en un momento de su vida: “viajaba bastante seguido a casa central de Vialidad, por gestiones necesarias para rápida resolución y un viernes a la tarde, volviendo de Bs As (me había olvidado la llave de casa), toco el timbre, me atiende mi pequeño y me preguntó: ¨Que, ma no estabas en casa?¨ y yo no había estado 3 días. Fue durísimo y claramente debí hacer una elección, casi de vida, de allí en más la familia primero”.

Si bien la Ing. Paz fue Jefa y Directora en diferentes ámbitos, reconoce que al género femenino “le cuesta un poco más ascender posiciones dirigenciales tanto institucionalmente como en la parte privada, sobre todo si la profesional tiene varios hijos; siempre la mujer debe demostrar un poco más que el hombre, que puede resolver situaciones”. Asimismo, destaca que es la visión de la mujer, la que puede detectar soluciones útiles para la sociedad, y nos cuenta un par de anécdotas: “-me preocupaba mucho el estado de las banquinas en RN 34, por la naturaleza de los suelos, ya que se erosionaban permanentemente y representaba alto riesgo. Ruta peligrosa. En Casa Central no entendían por qué el pasto y la vegetación no eran suficientes para dar solución. Insistimos tanto por su mejora, con muchos estudios, hasta que lo logramos y hace 7 años aproximadamente se terminó de enripiar los 330km. La seguridad fue el aspecto fundamental. La otra anécdota, - Puente carretero, Santiago – La Banda. A poco de ingresar a Vialidad, pensé que era muy necesario proceder a ampliar el puente ya que el ferrocarril había dejado de funcionar hacía mucho tiempo. Así que empecé a tramitar ante el ENABIEF (Ente Nacional de Administración de Bienes Ferroviarios) y la DNV (Dirección Nacional de Vialidad) la posibilidad de utilizar la zona ferroviaria para la ampliación de la calzada, que logramos varios años después, con gestiones muy intrincadas. Con estas anécdotas quiero destacar que normalmente la sensibilidad que tenemos las mujeres, muchas veces nos hacen advertir obras que son muy importantes para lograr no solo el desarrollo de la sociedad sino también apuntalar la vida. La ingeniería es una pasión”.